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Consejos para prepararnos contra el frío y no derrochar en calefacción en Móstoles

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viernes, 13 de diciembre de 2024

La OCU nos invita a ahorrar energía. Consejos para prepararnos contra el frío y no derrochar en calefacción en Móstoles.

Esta semana los guantes y los gorros junto con los abrigos más gordos se han hecho por fin los reyes de nuestra indumentaria. El frío ha tardado en llegar pero ya está aquí. Toca abrigarse y de manera porque las máximas no llegan a los dos dígitos y las mínimas están en Móstoles en torno a cero grados. Ahora sí que la calefacción es imprescindible y su uso la convierte también en un golpe a nuestros bolsillos. Según algunas encuestas el 26% de los hogares españoles gasta más de 100 euros en calefacción y la media al año se sitúa en torno a los 1.000 euros. La Organización de Consumidores y Usuarios una vez más se preocupa por nuestra economía y nos invita a ahorrar con unos pequeños consejos. La OCU lo tiene claro, no pasar frío pero sin arruinarnos. Consejos para prepararnos contra el frío y no derrochar en calefacción en Móstoles.

Decálogo de OCU

En concreto la OCU nos hace un decálogo de recomendaciones:

Poner a punto los radiadores

Antes de encender la caldera, es importante que comprobar el estado de los radiadores y que funcionan correctamente. Revisar si están abiertos o cerrados y probarlos por si es necesario purgarlos.

Comprobar la caldera

Revisar la presión de la caldera y hacerlo cuando esté en frío. Aunque generalmente la presión debe estar entre 1-1,5 bares (zona verde del manómetro), consultar antes el manual de instrucciones del aparato y asegúrase de cuál es la presión recomendada por el fabricante. Si tuviese una presión inferior a 0,5 bares, los más probable es que la caldera no funcione.

Ajustar la temperatura de trabajo de la caldera. Si esta es de condensación, se aconseja que la temperatura sea de 55-60 ˚C. En el caso de una mixta (calefacción+ACS), la temperatura de salida del agua de los grifos recomendada dependerá de si se trata de un sistema instantáneo (40-50 ˚C) o de una caldera con acumulador incorporado (55-60 ˚C).

Revisar el termostato

El termostato es el dispositivo encargado de regular el encendido y el apagado del sistema de calefacción, por lo que hay que asegurarse de que funciona correctamente. Comprobar las pilas si tu termostato es digital.

¡No te pases con la temperatura!

Algo tan sencillo como establecer la temperatura de la casa a 21 ˚C puede conseguir que ahorremos hasta un 20% de energía. Es mejor abrigarse un poco que ir en manga corta como si estuvieramos en pleno verano. Con una temperatura de 16 ˚C durante la noche, estaríamos ahorrando un 13% con respecto a mantenerla encendida a 20 ˚C.

Instala válvulas termostáticas en los radiadores

Para regular la temperatura de los radiadores a nuestro gusto, la OCU recomienda que se instale válvulas termostáticas. Estas válvulas funcionan automáticamente y están compuestas de dos piezas.

Abrir solo los radiadores que se van a utilizar

Cerrar tanto los radiadores como las puertas y las ventanas de las habitaciones que no se utilizan.

No cubrir los radiadores

Cubrir los radiadores con elementos decorativos o usarlos como tendedero o «secadora» casera de ropa conlleva que la calefacción tenga que hacer un mayor esfuerzo para ofrecer la temperatura a la que se la ha configurado y, por tanto, un mayor consumo de energía.

Poner reflectores en los radiadores

Colocar un panel reflectante entre el radiador y la pared ayudará a aprovechar y distribuir mejor el calor, recuperando entre un 10-20% del calor que se pierde hacia el muro.

La decoración también aísla

Utilizar alfombras y cortinas de color oscuro para que absorban la radiación solar ayudará a mantener e, incluso, subir la temperatura de tu casa. También lo hará usar cortinas dobles como, por ejemplo, una cortina fina que permita entrar la luz y el calor del sol y otra más gruesa que no deje pasar el frío nocturno.

Otras formas de mejorar el aislamiento es cubrir las paredes con cuadros o estanterías (la temperatura de una pared donde hay un cuadro puede llegar a ser 1,5 ˚C más alta que la de una pared desnuda), o bien poner un zócalo para proteger del frío que sube del suelo.