Dedicados a cirugía ambulatoria. Cuatro nuevos quirófanos en el Hospital Rey Juan Carlos de Móstoles.
El Hospital Universitario Rey Juan Carlos da cobertura sanitaria a cerca de 200.000 habitantes de 18 municipios (Móstoles, Navalcarnero, Cadalso de los Vidrios, San Martín de Valdeiglesias, Villa del Prado, Navas del Rey, Villaviciosa de Odón, Cenicientos, Rozas de Puerto Real, Pelayos de la Presa, Aldea del Fresno, Sevilla la Nueva, Villamanta, Villamantilla, Villanueva de Perales, Chapinería, Colmenar de Arroyo y El Álamo). El Hospital cuenta con 354 habitaciones individuales, 18 dobles, 134 consultas, 36 puestos de hospital de día médico y 14 puestos de diálisis. En el área quirúrgica dispone de 12 quirófanos, 6 salas de dilatación-paritorio, 32 gabinetes de exploración, 78 puestos de urgencias, 21 salas de radiología, 10 puestos neonatología y 18 puestos de UCI. A estas instalaciones toca unir ahora nuevos quirófanos para cirugía ambulatoria. Cuatro nuevos quirófanos en el Hospital Rey Juan Carlos de Móstoles.
Duración no prolongada
Los nuevos quirófanos están dedicados preferentemente a actividad quirúrgica ambulatoria y de baja complejidad, cuyos procedimientos tienen una duración no prolongada y que permiten el alta hospitalaria el mismo día de la intervención, y en pacientes sin enfermedades crónicas no controladas y cuyo estado de salud y situación personal son compatibles con su recuperación domiciliaria. Especialmente de Oftalmología y Dermatología; y puntualmente de otros servicios como Cirugía Ortopédica y Traumatología, Cirugía General y Digestiva, Urología, Otorrinolaringología, Cirugía Máxilofacial… Cuentan con espacio de información para los familiares, reanimación y tecnología propia para aumentar la actividad quirúrgica, cuya ratio es mayor que la de un quirófano central, debido al perfil de las intervenciones y la agilidad de los circuitos.
Para atender la creciente demanda asistencial que viene registrándose desde hace unos años, y que se traduce en un mayor volumen de actividad tanto en Urgencias como en consultas e intervenciones quirúrgicas. “Este escenario nos ha llevado a optimizar la utilización de los espacios, el uso de los recursos y la organización de los flujos asistenciales, así como a consolidar nuestra apuesta por la creación de canales de comunicación y la implementación de servicios y circuitos no presenciales, entre otras medidas, para anticiparnos y adaptarnos a las necesidades y expectativas de nuestros pacientes”, explica el Dr. Juan Rey, director médico del centro hospitalario. “Las ventajas para los pacientes son claras, tanto desde el punto de vista clínico como de su experiencia: una disminución de las complicaciones asociadas a la intervención, fundamentalmente de tipo infeccioso, al no requerir ingreso en un entorno hospitalario; una recuperación más rápida, puesto que se inicia con movilización; y un retorno al entorno habitual del paciente mucho más temprano”, asevera el Dr. José Luis Ayala, jefe del Servicio de Reanimación y Anestesiología del hospital mostoleño y coordinador de su Bloque Quirúrgico.
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